Tenías los ojos negros y soñaste
que un cielo más azul y más lejano te aguardaba
y tú, como arbolito
seco bajo la lluvia, florecías.
No se pueden tener catorce años
y tantas esperanzas
rodeado de arena.
Ahora quedan arriba
El sol y las gaviotas
y la sombra tumbada de una barca
y tú, debajo, sabes
demasiado temprano y sin remedio
cuánta amargura esconden
los mares en su fondo.
Isabel Martín Salinas
España
España
Cuanta tristeza esconde el poema, la cruda realidad de la inmigración através del Estrecho.
ResponderEliminarFeliz fin de semana
Besos
Un largo dolor y una inmensa ternura. Es la vida... ¡HERMOSO !
ResponderEliminarBesos de luz.
me ha encantado tu comunicacion con las letras
ResponderEliminarBellísimo, sensible, profundo...
ResponderEliminarABRAZO GRANDE,TRINI QUERIDA.