Ahora como un ángel apareces
y me rodeas sin decirme nada.
Ángel que yo cuidara tantas veces
sin saberlo, callada.
En todo lo que miro permaneces
como el aire feliz de la mirada.
Me parezco a tu ausencia y te pareces
a mí resucitada.
Porque viniste cuando me moría
a devolverme a vivas caridades;
porque mi noche muda se hizo día
por gracia de tu voz iluminada,
en esta eternidad con que me invades
yo que no era, soy tu enamorada.
Mª Elena Walsh
Argentina
Ramos Mejía, 1 de
febrero de 1930/
Buenos Aires, 10 de enero de 2011
Es un bello poema el de M. Elena.Versos llenos de amor angelical.
ResponderEliminarUn abrazo y que tengas una Feliz Pascua de Resurrección.!!
Estos son los momentos intensos que se viven en el recuerdo del amor y la pasión, que ya no está en carne y huesos.
ResponderEliminarMuy muy bello el poema de la Walsh.
Abrazos!