Este sabor a nieve nuevamente,
o a ceniza de nieve y a moneda,
a cobre sulfatado por los años;
ese sabor a invierno en la garganta.
Se desmorona el aire entre los dedos
y crujen las ventanas de la ausencia
como un violín cansado o un espejo
roído por el hongo del vacío.
Ha vuelto a posponerse el equipaje,
a quedarse plantado ante el silencio
en el fondo amarillo de los muebles.
A veces cae la lluvia en las ruinas,
se hiela entre las piedras y anochece.
Es tan frío el dolor como la nieve.
Juan José Vélez Otero
España
Sanlúcar de Barrameda, Cádiz, mayo de 1957
Sanlúcar de Barrameda, Cádiz, mayo de 1957
Qué fría es la ausencia,...más que fría.
ResponderEliminarAúnque ya lo conocía, me encantó volver a leerlo, gracías por compartir.
Besos