Crea
cada uno de tus poemas
como
si fuera el último.
En
este siglo saturado de estroncio,
lleno
de terrorismo,
en
el que todo ha echado a volar con velocidad supersónica
la
muerte viene aún mas rápida.
Manda
cada una de tus palabras
como
si fuera la última carta antes de la ejecución,
como
un mensaje en el muro de la prisión.
No
tienes derecho a mentir,
ni
el derecho a los juegos infantiles.
Simplemente
no tienes tiempo
para
corregir tus errores.
Escribe
cada uno de tus poemas,
lacónicos
y despiadados,
con
sangre, como una despedida.
Blaga Dimitrova
Bulgaria
Bjala
Slatina, 2 de enero de 1922
Sofía,
2 de mayo de 2003
No hay comentarios:
Publicar un comentario