31 octubre 2016

Javier Salvago, Hoy como ayer

Cuando una tarde
se pide al camarero lo de siempre
una taza de té, porque el alcohol
nos enseñó los dientes.

Cuando se vuelve a los recuerdos
para huir del presente
-porque la vida
nos enseñó los dientes-...

Lo discreto sería no levantarse,
quedarse en la cama, solo y bien tapado,
y decirle a la muerte, cuando venga:
-Llegas con unos años de retraso.

Javier Salvago
España
Paradas, Sevilla, 1950/
Photobucket

No hay comentarios: