Siempre hay tiempo para un sueño.
Siempre es tiempo de dejarse llevar
por una pasión que nos arrastre hacia el deseo.
Siempre es posible encontrar la fuerza
necesaria para alzar el vuelo y dirigirse hacia lo alto.
Y es allí, y solo allí, en la altura,
donde podemos desplegar nuestras alas en toda su extensión.
Solo allí, en lo más alto de nosotros mismos,
en lo más profundo de nuestras inquietudes,
podremos separar los brazos, y volar.
Dulce Chacón
España
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2 comentarios:
Hola de visita por tu blog, Me gusta todo lo que veo y todo lo que leo. saludos
Que lindo, muy esperanzador..
Besos
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