10 junio 2012

Julio Cortázar, Quizá la más querida

Me diste la intemperie,
la leve sombra de tu mano
pasando por mi cara.
Me diste el frío, la distancia,
el amargo café de medianoche
entre mesas vacías.

Siempre empezó a llover
en la mitad de la película,
la flor que te llevé tenía
una araña esperando entre los pétalos.

Creo que lo sabías
y que favoreciste la desgracia.
Siempre olvidé el paraguas
antes de ir a buscarte,
el restaurante estaba lleno
y voceaban la guerra en las esquinas.

Fui una letra de tango
para tu indiferente melodía.

Julio Cortázar
Argentina
 Ixelles, Bélgica, 26 de agosto de 1914
París, Francia,12 de febrero de 1984
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2 comentarios:

fgiucich dijo...

Maestro!!! Abrazos.

José Manuel dijo...

Edificaba versos de las cosas más cotidianas... Era un bolero personificado.
Me encanta Cortazar, gracias por compartir.

Besos