08 agosto 2017

Ángela Figuera Aymerich, Cañaveral

Entre las cañas tendida;  
sola y perdida en las cañas.    

¿Quién me cerraba los ojos,     
que, solos, se me cerraban?     

¿Quién me sorbía en los labios
zumo de miel sin palabras?      

¿Quién me derribó y me tuvo   
sola y perdida en las cañas?   

¿Quién me apuñaló con besos 
el ave de la garganta?       

¿Quién me estremeció los senos       
con tacto de tierra y ascua?     

¿Qué toro embistió en el ruedo
de mi cintura cerrada?     

¿Quién me esponjó las caderas        
con levadura de ansias?  

¿Qué piedra de eternidad
me hincaron en las entrañas?  

¿Quién me desató la sangre     
que así se me derramaba?        

...Aquella tarde de Julio,  
sola y perdida en las cañas. 
Ángela Figuera Aymerich
España
Bilbao, 30 de octubre de 1902
Madrid, 2 de abril de 1984

3 comentarios:

Una mirada... dijo...

Qué injusta es la Literatura con las mujeres poetas y a cuántas grandes sigue manteniendo ocultas.

Buenisima elección, reina.

Belén Rodríguez dijo...

Esta mujer es una de mis debilidades poéticas. Gracias por traerla! Besos.

tecla dijo...

Es la primera vez que la leo. Es una pasada.
El talento traspasa los siglos Trini.