metáforas, exporta alegorías. Podía ser un trabajador por cuenta propia,
uno de esos que rellena cuadernos de hoja azul con números
de debe y haber. De hecho, lo que debe son palabras; y lo que tiene
es ese vacío de frases que le posee cuando se arrima
al cristal, en invierno, y la lluvia cae del otro lado. Entonces, piensa
que podría importar el sol y exportar las nubes. Podría ser
un trabajador del tiempo. Pero, en cierto modo, su
método se confunde con el de un escultor del movimiento. Hiere,
con la piedra del instante, lo que va camino de la eternidad;
atrapa el gesto que sueña el cielo; y fija en la dureza de la noche,
el batir de alas, el azul, la sabia interrupción de la muerte.
Mexilhoeira Grande, Portimão , 29 de abril de 1949
2 comentarios:
No lo conocía, pero tomo nota...
Saludos y un abrazo!
Qué expresión tan fantástica del Arte y la Poesía, un trabajador de las palabras y del tejido de la vida es el poeta, que hace pararse la muerte por un instante.
Maravilloso es poco.
Un abrazo, querida amiga.
Te vuelvo a felicitar por la extraordinaria sensibilidad que muestras en tus elecciones. Besazos.
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