Las arpas de la óptica alegría...!
Juan Ramón Jiménez
El azar, ese dios
extraviado
que libra su
batalla, fuego a fuego,
no está sólo
escondido en la catástrofe:
a veces un gorjeo
lo delata
y sobornado,
entonces
admite durar un
poco en la alegría.
Uruguay
Montevideo, 2 de
noviembre de 1923
1 comentario:
Si, la suerte o el azar se posa tanto en la tristeza, como en la alegría, siempre nos sorprende, amiga.
Gracias por mostrarnos a esta inteligente poeta, Trini.
Mi abrazo y mi cariño.
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