envueltos
por las hojas doradas.
El
mundo no acaba en el atardecer,
y
solamente los sueños
tienen
su límite en las cosas.
El
tiempo nos conduce
por
su laberinto de hojas en blanco
mientras
cae el otoño
al
patio de nuestra casa.
Envueltos
por la niebla incesante
seguimos
esperando:
La
nostalgia es vivir sin recordar
de
qué palabra fuimos inventados.
2 comentarios:
Trajiste a tus citas poéticas a mi coterráneo, Giovanni Quesesep, con este poema donde acierta en la naturaleza de la nostalgia. DE esos están vivos los poemas, del vate costeño, una melancolía que no duele la carne pero si el alma, como en esto otro poema:
"Felicidad en ruinas
Lo que han visto mis ojos
Volver al tiempo amado
Ya fugitiva música del polvo"
Un abrazo. Carlos
Siempre es maravilloso leer a Quessep. Pasado mañana en Popayán presentará su más reciente libro: Abismo Revelado.
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