04 marzo 2011

Gioconda Belli, Desafío a la vejez

Cuando yo llegue a vieja
-si es que llego-
y me mire al espejo
y me cuente las arrugas
como una delicada orografía
de distendida piel.
Cuando pueda contar las marcas
que han dejado las lágrimas
y las preocupaciones,
y ya mi cuerpo responda despacio
a mis deseos,
cuando vea mi vida envuelta
en venas azules,
en profundas ojeras,
y suelte blanca mi cabellera
para dormirme temprano
-como corresponde-
cuando vengan mis nietos
a sentarse sobre mis rodillas
enmohecidas por el paso de muchos inviernos,
sé que todavía mi corazón
estará -rebelde- tictaqueando
y las dudas y los anchos horizontes
también saludarán
mis mañanas.

Gioconda Belli
Nicaragua

Managua, 9 de diciembre de 1948 
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8 comentarios:

Meri Pas Blanquer (Carmen Pascual) dijo...

Tan intensa esta poetisa... emociona de verdad.

Maritza dijo...

Una hermosura con MAYÚSCULAS este poema.
Tremendo.
Potente.
Creo que puede identificar a la mayoría de las mujeres.
Me gusta cuando habla de las arrugas productos de lágrimas y preocupaciones. Creo que cuando cada una de ellas tiene una historia de este tamaño, se deben amar...cada una se debe amar...porque ha sido mucha la entrega.

Me gusta también su escrito porque es "fácil", no hay que hacer un gran esfuerzo para sentirlo...sin dejar de ser una obra maestra.
Genial!

Abracitos grandes, Trini.

Gracias por esta entrada.

merce dijo...

Que buena elección Trini...!!!


Me encantó.



Un abrazo grande

Tesa Medina dijo...

Cuando yo llegue a vieja, más todavía, si es que llego, me gustaría que mi corazón también siguiera tactiqueando salvaje y tierno como ahora.

Una maravilla. Me encanta Belli.

Besos, Trini

Laura Caro Pardo dijo...

Me ha gustado tanto que la compartiré en mi blog de poemas preferidos...

Un besazo, Trini.
Y mil gracias.

Unknown dijo...

Me encantó el poema,quisiera compartirlo.Gracias.Bendiciones

Trini Reina dijo...

Por supuesto!

Adritii dijo...

Poema bellísimo con el cual se sienten identificadas todas las mujeres

Gracias por ese espléndido poema