Allí de donde
vengo nada me retenía.
Sé que nada me
llama al lugar al que voy.
Por la ventana
escueta desfilan los paisajes.
Sería hermoso no
llegar a parte alguna;
permanece así,
viajando de un
lugar que ya no existe
a otro que jamás
existirá.
Juan
Bonilla
España
Jerez
de la Frontera, Cádiz, 11 de agosto de 1966
1 comentario:
La sensación de viaje, el viaje de la vida, se hace más nítida en mi caso con el paso de los años. Claro que ni importa de donde vengo, ni tampoco a donde voy; eso solo son escenarios, atrezzos cambiantes, importo yo, e importa que viajo. Un beso Trini, hacía eones trisiestos que no entraba en tu blog
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