de perder el respeto,
de agarrarse a la vida
como si nada fuera,
como si ya la muerte
se hubiera convertido
en borroso subtítulo
de una vieja película.
Nos fuimos desnudando
en andenes lentísimos,
al filo de la noche,
cuando la madrugada
era una vieja furcia.
Somos lo que aprendimos
en esta soledad donde regamos
margaritas de plástico y silencio.
María Rosal
España
España
3 comentarios:
Hay mejor enseñanza que el propio ejemplo de nuestros padres( entendiéndose por los que nosotros observamos cuando pequeños, a todo nivel)?
Qué tremendo el último verso!
"en esta soledad donde regamos margaritas de plástico y silencio".
(me acordé de mi "regando cerezos en la nieve"...toda una inutilidad).
ABRAZOS GRANDES,TRINI.
un placer leerte
Los invito a seguir dos blogs que abrieron dos amigas, para que les escriban y estimulen como blogueras nuevas que son.
Son:
1)Póngale cola al burro:
http://pongalecolaalburro.blogspot.com/
2) Marcelerías:
http://marcelerias.blogspot.com
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